Gracias a su fortaleza, velocidad y carácter, Iñaki formaba parte del reducido grupo que compone la élite del himalayismo mundial. En 2008, un derrame cerebral le inmovilizó a 7400 metros en el Annapurna. Cinco días de épicos esfuerzos a cargo de algunos de los mejores himalayistas no fueron suficientes para rescatarle y uno de los más admirados montañeros nos dejó. Este relato lúcido y desnudo nos desvela como entendía él la montaña y la vida.
ENCENDER UNA HOGUERA
16.00€CHRISTOPHE CHABOUTÉ SE ESTRENA EN EL CATÁLOGO DE NORMA CON UN DESGARRADOR RELATO DE JACK LONDON.En 1896 se descubrieron ricos yacimientos de oro al norte de Canadá, en Klondike. Muchos aventureros se dirigieron hacia allí, a pesar de las duras…