Estas cartas nos recuerdan que la paciencia es reina y que hay un arte de mirar las cosas. Este arte, el de la botánica, nos permite reconciliarnos con nosotros mismos y con el mundo. «A cualquier edad, el estudio de la naturaleza debilita el gusto por las diversiones frívolas, previene el tumulto de las pasiones y lleva al alma un alimento que la aprovecha, llenándola del más digno objeto de sus contemplaciones». Un delicioso texto de Rousseau, en edición de José Tito Rojo.
EL PARAÍSO A PINCELADAS
21.90€Eduardo Barba, autor de El jardín del Prado, nos propone en esta ocasión un recorrido por la pintura de jardines, esos mágicos espacios verdes que nos vinculan íntimamente a la naturaleza y que, como obra de arte viva, constituyen uno…